TERREMOTO PARTE I

En esa ocasión JCFLF, un joven estudiante de administración de 19 años de edad, regresaba de la universidad (por un inconciente motivo decidió no continuar en el local) dirigiéndose a su casa donde descansaría unas horas, cuando de pronto un movimiento en la tierra lo sorprende, su tía que se encontraba en la sala se adhiere a sus brazos y rompe en llanto. JC alarmado se apresura en abrir la reja con su llave, para mala suerte el movimiento era tan fuerte que resultaba casi imposible introducir la llave en la chapa (la reja parecía un abanico ubicado verticalmente y en movimiento). Luego de unos instantes logra introducir la llave – ya los habitantes del edificio estaban desesperados detrás de JC esperando pasar – y todos salen corriendo en distintas direcciones.

En pleno movimiento de la tierra JC es alcanzado por su hermana mayor Diana (que traía en brazos a Kiara, la mascota del hogar) quien a pasos veloces había salido de casa para abrazar a su hermano y asegurarse en un lugar.

El movimiento ya convertido en TERREMOTO no se detenía, los postes bailaban, los cables acompañaban a los postes en la danza, el suelo era la mas cercana imitación a las olas del mar, la casa llena de habitaciones eran los tanques que en una guerra pasan al lado de los soldados, ya nada parecía humano y natural. Al mismo instante las luces de los postes y casas se desvanecen impidiendo una clara visión del desastroso espectáculo que iniciaba, ya nada podía haber sido peor.

Diana abraza más fuerte a su hermano JC, y Kiara solo ladra desesperadamente intentando defender a sus asustados amos de una amenaza que no puede ver sino sentir. Diana baja la mirada y pide a su hermano que rece para encomendar nuestras vidas al amo supremo de la tierra. JC permanecía físicamente calmado pero por dentro estaba desmoronándose (aun no sabia a que se debía este desastre), abrazaba a su hermana mas fuerte aun, de pronto a lo lejos observa unas extrañas luces muy parecidas a relámpagos o explosiones pero sin sonido; “que es esto?” se pregunta el joven, no hay respuestas y solo existe llanto alrededor. La gente grita con más pasión, no queda esperanza en muchos, algunos aseguran el fin de la tierra y nadie cree en nadie.

La tierra parece conceder el deseo de muchas personas que se encomendaron al Gran Rey Protector de la Galaxia y el movimiento disminuye en gran magnitud. Los postes se han cansado, los cables se rehúsan a danzar, el suelo ha retomado el conocimiento y es suelo nuevamente, el movimiento de las habitaciones se ha detenido. El movimiento duró aproximadamente dos minutos y se fue calmando poco a poco, pero en la mente de las personas el desastre ha durado y durará meses. Nadie quiere entrar a sus casas por miedo a “replicas”, solo unos cuantos se animan, en ese instante Juan Carlos va corriendo a toda velocidad y entra a su casa llegando hasta su habitación a oscuras a recoger todo material necesario para sobrevivir y conllevar el resultado del desastre. Un maletín con velas, fósforos, un cubrecama, panes y dinero es lo que encuentra a su paso.